Alcalá del Río pasa desapercibido. Nuestro municipio no tiene proyección ni notoriedad. Desde el gobierno local no se ponen en valor sus riquezas patrimoniales, culturales, naturales y etnológicas. El resultado de esta falta de acción es que nuestro pueblo es un desconocido que se queda al margen y no se beneficia de los flujos turísticos de la capital y la provincia.
Como ejemplo, mientras la prensa destaca y promociona las ferias que se celebran en septiembre, la nuestra es como si no existiera:
El equipo de gobierno debe trabajar en la promoción de nuestro municipio para que destaque dentro de la provincia y aprovechar los beneficios que esto supone.
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