El día 11 de Julio, justo un mes después de la toma de posesión de la nueva Corporación Municipal, tuvo lugar en el Salón de Plenos del Ayuntamiento la celebración del llamado Pleno de Organización, primero que ha de celebrarse según las normas de funcionamiento del Régimen Local, y en el que, entre otros asuntos de trámite necesarios para el funcionamiento del Consistorio, se sometieron a votación las asignaciones económicas de los concejales del equipo de gobierno y del resto de grupos municipales.
Dicho pleno vino precedido de múltiples reuniones entre los distintos grupos para intentar alcanzar un acuerdo sobre dichas asignaciones; prueba de ello es que se celebró el último día del plazo que marca la legislación para su realización.
A la propuesta inicial de la Alcaldía, el Partido Popular presentó su desacuerdo al considerarlas excesivamente altas, ya que, si bien representaba un ahorro sobre el total de gastos de la legislatura anterior, eran prácticamente iguales a las que habían estado en vigor durante el último año, tras la rebaja en las asignaciones realizadas en 2010 por el anterior equipo de gobierno.
En ese momento, los concejales del Partido Popular elaboraron una contrapropuesta que fue presentada al resto de grupos, intentando buscar un consenso entre todos ellos para sacarla adelante por unanimidad, pero este acuerdo fue imposible por falta de entendimiento entre los dos grupos mayoritarios.
Finalmente, la Alcaldía presentó una segunda propuesta rebajando sus pretensiones iniciales, que fue la que llevó a pleno, y que resultó aprobada con los únicos votos favorables de los concejales del PSOE, ya que los ediles de IU, PP y PA se abstuvieron. El PP fue el único partido de la oposición que defendió su postura en el turno de intervenciones.
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